
Lo que me motiva a ser Coach es la emoción de ser parte de la formación de los niños y jóvenes, el gusto de verlos crecer felices y cumpliendo sus metas.
Además de lo anterior, como Coach del LiM tengo la fortuna de contar con grandes guías en mis compañeros, padres de familia y por supuesto mis alumnos, así como constante apoyo en mi desarrollo profesional y personal.